Tomos completos podrían escribirse sobre el verdadero poder de la Palabras y, a título de ejemplo, de los orígenes remotos de la publicidad.
Uno de los hallazgos históricos más notables remite al papiro en cuyo contenido se detectó lo que ha sido reconocido mundialmente como el primer aviso publicitario. En la original pieza, Hapu -de profesión, textilero- recurría a la buena voluntad de los habitantes de la ciudad egipcia de Tebes, para hallar a uno de sus esclavos extraviados. La pieza rezaba, textual:
‘El hombre-esclavo, Shem, ha huído de su buen amo, Hapu el Textilero; se recurre a los buenos ciudadanos de Tebes para que ayuden a regresarlo. Es un hitita, de un metro sesenta de estatura, de complexión tosca y de ojos marrones. Se ofrece la mitad de una moneda de oro a cambio de novedades sobre su paradero. Y, por su retorno a la tienda de Hapu el Textilero, donde la mejor ropa satisface vuestros deseos, se ofrecerá una moneda de oro entera‘.
Sirva este ilustrativo ejemplo para comprender el genuino poder de la palabra escrita. Ya se trate de información, de apelativos, o de copies publicitarios, el sapiente redactor o copywriter siempre habrá de atender a las necesidades primarias de su audiencia o target. Al menos, así lo entendió el Hapu en el antiguo Egipto: fusionó la comunicación de una necesidad -esto es, la detección y eventual retorno de su esclavo- con la promoción pionera de los servicios que ofrecía, en una época en la que la vestimenta era un insumo crítico. Sin saberlo, el trabajador sentaba las bases históricas para los avisos publicitarios escritos del futuro.
Todo proyecto potable de negocios ha de traducirse apropiadamente en un buen texto o copy. No se trata simplemente de llenar carillas, o de cumplir con una faena encargada. Cada oración tiene el potencial para comunicar mucho; y, transitivamente, un párrafo puede lograr milagros para su empresa. A la postre, un advertorial o post patrocinado cuentan con la capacidad para amplificar geométrica y exponencialmente una gran idea. Hasta que el emisor pueda alcanzar la cima de sus metas y objetivos: viralizar la diseminación de sus productos y/o servicios. Este es el verdadero Nirvana.
Imite Usted el ejemplo de Hapu, y construya Historia. En Nubian Ghostwriters, podemos ayudarle.
El Poder de la Palabra
•